El
significado de los sueños siempre es
misterioso. Hace falta un conocimiento claro de la interpretación para darles
el sentido adecuado, lo cual se consigue teniendo en cuenta todos y cada uno de
los elementos que aparecen en él.
¿Qué son los sueños?
En el transcurso de la vida de las personas y de los
animales, una parcela de tiempo de considerable duración se destina al sueño (un tercio de la vida
aproximadamente, ya que dedicamos al descanso una media de seis a ocho horas
diarias, aunque hay personas que se conforman con tres y otras que ((que no funcionan))
si no duermen diez). Cuantos más pequeños son los niños, más tiempo dedican al sueño, mientras que los ancianos
duermen cada vez menos según avanza su vida.
Es cierto que no podemos desarrollar actividad continuamente;
necesitamos descanso y un sueño reparador
para que nuestras funciones vitales se desarrollen con normalidad. Está
demostrado por experimentos realizados en laboratorios (y desgraciadamente también
en campos de concentración) ya que una persona no puede llevar una vida normal
si no ha descansado el tiempo suficiente.
A las 72 horas de no haber dormido, se presentan importantes
desajustes en el comportamiento de las personas, como pérdida de reflejos y
problemas con los sentidos, puesto que no funcionarán bien ni la vista ni el
oído y se tienen serias dificultades al hablar.
Pasados tres o cuatro días sin dormir el sujeto empieza a
sufrir alucinaciones porque el organismo libera una sustancia muy parecida al
LSD, que es el alucinógeno artificial más fuerte que se conoce. El individuo
que consigue llegar a los nueve días sin dormir está completamente demenciado y
las personas que han sido sometidas en circunstancias especiales a este tipo de
torturas, cuando han llegado a ese punto han perdido la muerte.
Por lo expuesto hasta ahora podemos ver lo necesario que es
el sueño para el ser humano, tanto
como la comida o el agua, por lo que no es nada raro observar que el hombre
desde sus origines ha sentido una especial preocupación por saber qué ocurre en
este tiempo, lo que también ha sido objeto de estudio por parte de numerosos
científicos a lo largo de toda la historia.
El sueño es, por
su propia naturaleza, algo misterioso y oscuro. En los primeros tiempos los
–hombres pensaban que los sueños eran
manifestaciones de los dioses y el modo en que estos se comunicaban con ellos.
Gracias a las experiencias llevadas a cabo en la primera
mitad del siglo XX se ha establecido que el tiempo que dedicamos a dormir está
dividido en períodos de dos horas aproximadamente y que una fase de sueño débil es seguida por otra de sueño profundo.
También está demostrado que soñamos varias veces durante toda la noche, pero que los sueños que recordamos son aquellos que
se producen en la fase REM (Rapid Eye
Movement o Movimiento Rápido del Ojo). Esta fase de sueño profundo recibe su nombre por el movimiento rápido y
continuado de los ojos del durmiente.
Se recuerdan mejor los sueños
cuando despertamos en la fase REM, mientras que, si nos despiertan en cualquier
otro momento, los sueños son más
difusos o incluso no se recuerdan en absoluto.
Existen varios tipos de
sueños:
El sueño
denominado ((de vigilia)) que es el que se tiene cuando empezamos a dormirnos y
del cual apenas se recuerda nada. Este
sueño de vigilia suele estar compuesto por escenas de lo que nos ha
ocurrido durante el día, mezclado a veces con cierto grado de fantasía. Luego están los sueños más corrientes, que son los que tenemos durante toda la
noche y que dejan poca huella, por lo que resulta más difícil recordarlos. Por
último están los sueños que se
producen en la etapa Rem (cuando nuestro sueño
es más profundo) que son los que más se recuerdan, sobre todo si despertamos
durante dicha etapa.
¿Que significan los sueños?
El hombre desde tiempos remotos, ha tenido mucha curiosidad
por saber qué significaban los sueños.
Al principio de los tiempos y dada su ignorancia, atribuía su significado a
orígenes divinos. Pero cuando comenzó a hacerse más intelectual también comenzó
a estudiar este fenómeno, llegando a conclusiones totalmente distintas de las
de sus antepasados.
En el siglo VI a. de C. ya había documentación escrita de
las más antiguas culturas, en las que se hablaba del significado de los sueños. Existen pruebas de ello en
civilizaciones tan antiguas como la caldea y la egipcia.
Pero hasta la llegada de la cultura griega no se comenzó a
tratar este tema con seriedad. Los primeros oniromantes, o estudiosos del significado de los sueños, surgieron de
los adivinos y augures que en un principio adivinaban el futuro basándose en el
estudio de las vísceras de animales muertos.
De esta época ya se conservan manuscritos tan fiables y
documentados como El libro de la
interpretación de los sueños de Artemiodoro de Daldis, que no ha sido
superado hasta la fecha y en el que se dice que todos los sueños que vienen en él han sido documentados como para afirmar que
sus augurios eran los correctos.
Los romanos también dieron una gran importancia a los sueños y fueron muchas las personalidades
de los ámbitos cultural y religioso que dieron valor a su interpretación.
Posteriormente, en la Edad Media, este tema se convirtió en
tabú a causa de la actitud que adoptó la Iglesia Católica respecto a ellos,
considerando que eran manifestaciones del diablo. No sólo ocurría esto en el
seno de toda la Iglesia, porque lo mismo opinaba Lutero, que en sus prédicas
siempre afirmaba que había que huir de los sueños
porque estaban dictados por el Maligno. Con todo esto lo único que se
consiguió es que la gente afirmara descaradamente que no había soñado, porque de lo contrario se
verían perseguidos y muy probablemente acabarían en la hoguera.
Cuando pasó estas etapa y llegaron tiempos menos
intolerantes, se puso de moda otra vez la interpretación de los sueños; todas las cortes que se
preciasen tenían a un augur que daba sentido a cada uno de los sueños que tenían reyes y cortesanos.
En el siglo XIX ya se empezó a estudiar el tema con más
seriedad y fueron numerosos los científicos que dedicaron su tiempo a
investigarlo.
Pero hasta finales de siglo no se pretendió un respaldo
científico de la interpretación onírica, lo cual fue obra de Freud con su libro
La interpretación de los sueños, que
constituye la base pseudocientífica sobre la que se asientan los estudios del
siglo XX que se han dedicado a este tema.
Finalmente, debemos advertir a todas las personas que
consulten este libro que para la
interpretación de los sueños es necesario conocer a la persona que ha
soñado y el entorno en el que se mueve. Por otro lado, habrá que considerar los sueños según el contexto en el que se
desarrollen y habrá que tener presente los colores, olores y otros elementos a
ellos asociados. Esta obra constituye una buena guía para todas aquellas
personas que se estén iniciando en el maravilloso y especulativo mundo de la interpretación de los sueños.
Es por esto que nos adentramos en un mundo fascinante donde no hay reglas. Los sueños nos traen cada noche un mundo
insólito de personajes, visiones infernales, episodios maravillosos que
despiertos no podríamos vivir. Soñar es
abrir una puerta de la mente con ambiciones, deseos, miedos, fantasmas, tiempos
buenos y malos, son parte de la mente y constituyen una vía de acceso a
realidades que están más allá de la lógica.
Los sueños son únicos, ninguna otra
persona tiene tus emociones o tus experiencias. Cada sueño conecta con su propia " realidad" por lo que es
muy importante ponerlos en el contexto de las experiencias y vida personal.
Los sueños son una manera que el
subconsciente clasifica y procesa todos los problemas que se nos presentan en
la vida.
El trabajo de muchos psicoanalistas como Freud y Jung, han ayudado apersonas
normales y sanas, pero también a casos de perturbaciones mentales graves. Igual
que los médicos pueden tratar enfermedades físicas, los psicólogos pueden
enseñar a personas equilibradas a conocerse a sí mismas y llevar una vida más
feliz.
Es muy difícil, por no decir casi imposible, interpretarlos sin conocer a la
persona.
En esta ocasión dividiremos el Diccionario de los Sueños en partes según actúen en nuestros sueños los actos humanos, bebidas, colores etc. Dependiendo de ésto, tienen un significado u otro.
Actos humanos, Alimentos y bebidas, Anatomía, Animales, Colores, El tiempo, Enfermedades, Espiritualidad, Lugares, Mundo vegetal, Objetos, Personas, Varios.
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